jueves, 6 de octubre de 2011

La Danza sale a escena

Finalmente llegó el día, por fin se hace visible. Tantos años intentando explicar lo maravillosa que es. Lo que te puede hacer sentir. El mérito que tiene. Cuando ya piensas que es una batalla perdida, y asumes que para la mayoría de la gente eres un bicho raro, o que vas de snob por la vida, la hermana pobre de las artes sale a escena. Al principio a través del cine, en el mismo año hemos podido disfrutar en la gran pantalla de fantásticos y variados estrenos: "El último bailarín de Mao", "La Danza", "Cisne negro", "El esfuerzo y el ánimo". Incluso un cuidadísimo telefilme: "Ballet shoes".

El modesto éxito de estas obras me ha alegrado mucho pero, siempre he tenido en cuenta que disponían de un público natural, preseleccionado. En los tiempos que corren algo no es realmente conocido hasta que tiene alguna relación con la publicidad, con la venta de un producto, con el dios dinero. Tarde o temprano te das cuenta de que ya no somos ciudadanos, sólo consumidores.
Por eso al ver que diferentes empresas de gran consumo eligen la magia del movimiento de grandes coreógrafos para asociarla a su imagen de marca me doy cuenta de que ya es oficial: La Danza ya es visible. Veamos cuanto tiempo dura bajo los focos...


Campaña publicitaria de Air France en España de 2011


Ballet "Le Parc" coreografiado por Angelin Preljocaj en 1994 para el Ballet de la Ópera de París


Campaña de los grandes almacenes El Corte Inglés para el otoño de 2011, claramente inspirada en...


...las únicas y personalísimas creaciones de una de las mejores coreógrafas de danza contemporánea, la recientemente fallecida Pina Bausch, y la película en 3D sobre su obra, realizada por Wim Wenders y acabada de estrenar.

Dentro de poco Benjamin Millepied será conocido como ese chico guapo que sale en el anuncio de la colonia, en vez de como ese bailarín ordenado Caballero de las Artes y las Ciencias de Francia por la calidad de su trabajo como solista y coreógrafo para el Ballet de Nueva York, el American Ballet Theater, el Ballet de La Ópera de París, el de Ginebra...


Bueno, como decía antes, es el signo de los tiempos. Aunque ahora que lo pienso mejor, ya mis padres me contaban de pequeña, que los novios de su época de juventud le pedían al cura que en la boda sonara la música del anuncio del jabón Persil (la Marcha Nupcial de Mendelssohn), así que no sé de qué me sorprendo.

Mi esperanza es que "esto sea el inicio de una larga amistad" entre la danza y la publicidad, y que continúe su fructífera relación con el cine. Y que por el camino se vaya creando afición y que este país deje de considerar el disfrute del sufrimiento animal como su representación cultural en el mundo, y empiece a valorar la riqueza pasada y presente que tiene encarnada en grandes bailarines y coreógrafos, que no tienen otra opción que emigrar sí o sí para sobrevivir porque aquí no les apoya más que su familia, mientras en las grandes capitales culturales del mundo les reciben con los brazos abiertos.

Y dicho esto, me voy al cine a ver "Pina", ya os contaré.


"Danzad, danzad, si no, estamos perdidos"
Pina Bausch